Montenegro, Albania y Grecia
Atravesar los Balcanes hasta llegar a Atenas ha sido un viaje tan intenso como revelador.
En este último tramo del Velotour Sostenible por Europa, hemos comprobado una vez más que el potencial del cicloturismo en esta zona es enorme, pero aún requiere planificación, inversión y, sobre todo, una mirada inclusiva y sostenible.
La EuroVelo 8, aquí, parece más un track trazado desde una aplicación que una ruta realmente reconocida y adaptada sobre el terreno. Las diferencias entre países son notables, las infraestructuras desiguales y la señalización, inexistente.
- ¿Qué nos espera en esta última etapa del #EuroVeloTour?
- ¿Podemos hablar de cicloturismo inclusivo en esta parte del Mediterráneo?
- ¿Qué lecciones nos deja este tramo final hasta Atenas?
Montenegro y Albania
En Montenegro, la EuroVelo 8 sigue en fase de planificación. El país ofrece paisajes espectaculares, pero con una red viaria limitada, sin arcenes y sin infraestructuras específicas para bicicletas. Aunque el tráfico es moderado, la sensación de seguridad sigue siendo baja. Lograr una ruta realmente inclusiva y familiar en esta zona aún parece lejano.
En Albania, en cambio, el panorama cambia ligeramente. El caos de Tirana y Durrës contrasta con la calma de las zonas rurales e interiores, donde se puede disfrutar de carreteras más tranquilas, paisajes montañosos y un cierto respeto hacia las personas ciclistas. Aun así, se trata de un país que necesita seguir trabajando para integrar el cicloturismo en su desarrollo turístico y territorial.
Qafë Botë – Igoumenitza
Entramos en Grecia con esperanza. Las carreteras son tranquilas, con poco tráfico y rodeadas de un entorno natural magnífico. Sin embargo, la ausencia total de arcenes y la orografía montañosa alejan este tramo de los estándares EuroVelo y limitan su accesibilidad. Es un recorrido de gran belleza, pero no apto para todas las personas ni recomendable para familias con peques.
Igoumenitza – Amfilochia
Seguimos rodando por caminos secundarios y carreteras rurales. El tráfico es bajo, pero el continuo subir y bajar exige una buena condición física. Los pueblos rurales que atravesamos son pequeños y con pocos servicios, aunque ofrecen hospitalidad y calma. La belleza natural es indiscutible, pero la falta de infraestructuras y servicios convierte la ruta en un desafío más que en una opción accesible.
Amfilochia – Corinto
Entre Amfilochia y Corinto el recorrido transcurre por carreteras secundarias poco transitadas, pero de nuevo sin arcén. Apenas encontramos carriles bici, salvo dos pequeños tramos en Antirion y Corinto, de unos 800 metros cada uno.
Sin embargo, aquí descubrimos una oportunidad extraordinaria: cientos de kilómetros de una antigua vía férrea abandonada, perfectamente reconvertible en una gran vía verde. Una iniciativa así podría transformar la movilidad ciclista en esta región del Mediterráneo.
Corinto – Atenas
El tramo final hacia Atenas resume bien las fortalezas y debilidades del sur de Europa. Carreteras estrechas, sin arcenes, pero con tráfico moderado. Tres cruces en ferry (dos gratuitos y uno de pago, 2 € por persona) añaden un toque especial al recorrido.
La llegada a la capital, sin embargo, es un auténtico reto: tráfico caótico, ausencia total de carriles bici y un entorno poco preparado para la movilidad activa. El acceso al centro de Atenas deja claro que todavía queda mucho por hacer para que la bicicleta tenga un papel protagonista en la ciudad.
Inclusión y familia
En este tramo, la inclusión sigue siendo la gran asignatura pendiente. No hay señales adaptadas, ni servicios accesibles, ni condiciones que garanticen seguridad. Sin embargo, el potencial humano y natural de esta región es enorme. Las personas son amables, los paisajes inspiran y las distancias relativamente cortas entre pueblos podrían facilitar, con planificación y voluntad política, una red de rutas inclusivas y sostenibles.
Lo mejor del tramo
- Hospitalidad y cercanía de la gente.
- Paisajes costeros y montañosos espectaculares.
- Tranquilidad en zonas rurales y poco tráfico.
- Potencial de reconversión de la antigua vía férrea.
Puntos a mejorar
- Carreteras estrechas y sin arcenes.
- Ausencia total de señalización.
- Escasez de servicios y puntos de descanso.
- Falta de infraestructuras seguras e inclusivas.
Pedaleamos para aprender, compartir y mejorar
Con este último tramo cerramos un largo recorrido entre Cádiz y Atenas, donde cada pedaleada ha sido una oportunidad para observar, reflexionar y proponer.
Nuestro objetivo sigue siendo el mismo: dar visibilidad a la realidad del cicloturismo europeo y promover rutas seguras, inclusivas y sostenibles, para que cualquier persona pueda disfrutar del placer de pedalear.
📍 Las rutas documentadas están disponibles en nuestro perfil de Velorecicla en Ride With GPS.
ℹ️ Para conocer los trazados oficiales de la EuroVelo 8, visita la web oficial de EuroVelo
Velotour Sostenible 
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